– La honestidad. Fábula China.

La Honestidad. Fábula China.

Se cuenta que por allá del año 250 A.C. en la antigua China, un príncipe del norte del país estaba a punto de ser coronado emperador, pero de acuerdo a la ley debería casarse primero.

Sabiendo esto, el príncipe decidió hacer una competencia entre las mujeres jóvenes de su reino para decidir  quien podría ser su esposa, por lo que al día siguiente publicó un decreto en el que convocaba a una reunión en su palacio a todas las jóvenes que estuvieran interesadas en casarse con el, y  para comunicarles las características que debería tener para ser seleccionada como su futura esposa.

Una anciana, que tenía muchos años de servir en el palacio se entero de esta convocatoria la cual la lleno de tristeza, pues sabía que su joven hija tenía un gran sentimiento de amor por el príncipe, al llegar a su casa le comento estos hechos a la joven y se asombro al escuchar de ella que quería asistir a la reunión del palacio, por lo que sin poder creerlo le pregunto a la doncella:

– El Mito de La Caverna de Platón

El mito de la caverna -también llamado alegoría de la caverna- es una explicación metafórica, ideada por el filósofo griego Platón, sobre la situación del ser humano ante el conocimiento. A continuación se explica detalladamente en qué consiste.

En la narración del mito, Platón nos presenta a varios hombres prisioneros en una caverna. Al estar atados por el cuello, no pueden girar su cabeza y solo alcanzan a ver el fondo de la estancia. Detrás de ellos hay una hoguera que ilumina la cueva, y un pasillo por el que circulan hombres con todo tipo de objetos. Las sombras de estos últimos se proyectan en el fondo de la caverna, y esto es lo que ven los encadenados: proyecciones que confunden con la realidad.

– Fábula del Burro Viejo

Un día, el burro de un campesino se cayó en un pozo. El animal rebuznó fuertemente por horas, mientras el campesino trataba de buscar algo qué hacer.
Finalmente, el campesino decidió que el burro ya estaba viejo y el pozo ya estaba seco y necesitaba ser tapado de todas formas; que realmente no valía la pena sacar al burro del pozo.

Invitó a todos sus vecinos para que vinieran a ayudarle.
Cada uno agarró una pala y empezaron a tirarle tierra al pozo.
El burro se dio cuenta de lo que estaba pasando y desesperó horriblemente.
Luego, para sorpresa de todos, se aquietó después de unas cuantas paladas de tierra.